Una no puede tenerlo todo

marzo 05, 2008

Atrapada en un cambio hormonal, vivencial, de rutina y pensamientos, soy una loba débil y atontada. La cuesta se ha puesto más empinada de lo que había previsto, mis deseos se ven forzados a esconderse y la realidad me apalea implacable, periodicazo tras periodicazo,
-¡¡Loba mala, loba mala!!!- y en esta ocasión en lugar de morder y destrozar el periódico me escondo afligida en la cueva mas profunda.
Mi cuerpo se levanta de la cama todas las mañanas, pero mis ganas se arremolinan en la cama tapándose hasta la cabeza, arrastro mis pies y mis obligaciones, la ropa, los hijos, el esposo, los proyectos, la limpieza, el sexo y la ausencia de este, mis hormonas y las lágrimas que me fluyen a ratos como un aullido lastimero y profundo, la luna esta menguada y mi loba interna aúlla sin respuesta.
Acudí al doctor porque tengo ya tres semanas con un temblor en los parpados, un tic nervioso, me recomienda algo naturista y unos chochos de los que nunca he probado,
-tenía una postura anti chochos alópatas, pero con los tics no se juega- recuerdo mi niñez y los meses en los que tuve tics y fui tartamuda, la presión de vivir con mi madre era tal que mi cuerpo empezó a fallar; me pesa tener que tomar algo para conservar la calma, ¡¡¡una loba no debería necesitar esto!!! Me digo y me reprocho mientras la pastilla resbala por mi garganta. ¿De qué otra cosa necesitaré pasar pastillas? ¿Qué lecciones se me vienen por delante? Asustada relamo mis heridas al darme cuenta que las recomendaciones de mi doctor son casi imposibles de cumplir. –Hable de lo que la tensa, de lo que le molesta , para que su mente lo procese y deje de dañarla por dentro-, -hablé con su pareja , con los amigos, constantemente para que haga catarsis y se encuentre mas relajada-
Parece fácil ¿verdad?, el caso es que –no lo es- en absoluto, no tengo demasiadas amigas a quien aturdir con mis pendejadas existenciales y mi pareja ha decidido que su forma de apoyarme cuando me ve tronada es preparar la comida o el desayuno- ¡¡¡HABLAR!!- sí como no, con él no puedo hablar, no sé porque pero no recibo ni escucha, ni apoyo, ni empatía de él en ese aspecto, espero, por ahora.
Así que me quedan mis hijos pero los pedagogos dicen que eso los trauma, ¿luego entonces? Acudo a ustedes compañeras cibernéticas, me siento triste porque mi mas grande sueño se ha tenido que posponer una vez mas, porque me fastidia no ganar suficiente plata, porque no puedo platicar de nada intenso con mi pareja, porque me avergüenza tener que tomar chochos ansiolíticos, porque la lana no alcanza para soñar y vivir, porque no sé a donde va mi vida profesional- si es que existe algo así- porque estoy viva y no estoy disfrutándolo… así me siento ahora, rota.
Loba de Ciudad

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Amiga desconocida, y tan conocida a la vez. Pareciera que tu relato lo habría escrito yo misma... tantos años disfracé el desinterés, la apatía y hasta la rabia de mi esposo. Yo misma me decía, "pues así es él, así lo conocí y me casé con él, pues ya ni modo yo misma lo escogí ni quien me haya obligado". Pero al hacer este recuento de hechos, me decía también que ese no era el mismo con quien me casé. No fue hasta que le descubrí sus deslices con otras mujeres que me quité el velo...o fue al revés? Sí, tuve que agarrar coraje para querer ver lo que estaba tan claro como el agua. Sí, eso era, yo no lo quería ver, no quería saber... y lo que me ha tomado más tiempo ahora ha sido perdonarme. Perdonarme a mí misma por haberme dejado pisotear y ningunear. Por que finalmente yo lo permití. Y por mensa!! Pues en ese momento me cegué pensando que esa pareja era lo único en el mundo, mi razón de existir...por él tuve a mis dos hijos! Y es ahí donde estaba MAL! Sólo nosotros podemos cargar con nuestra propia existencia y mis hijos merecían padres felices, si no, qué iban a aprender? ...
Al entender eso, puede decirle "Adiós... esta vida que me das (que me doy) no me sirve, valgo mucho más. Quiero ser feliz!" Nunca amenacé... simplemente me di cuenta y me fui, sin esperar que fueran detrás mío.

Sin embargo, él me siguió, y cambió...

Anónimo dijo...

Mira, amiga Loba:
Estás en tremenda duda existencial!
He notado en tus escritos que te duele hasta la médula el posponer tu vocación ante tus actuales obligaciones! Si supieras qué rápido crecen los cachorros y dejan de necesitarte, te angustiarías menos!
Disfruta tu ahora, no volverá! Y ya verás, que tendrás el resto de tu vida para tu bendita música!
Pero, lo que si es tiempo vano, es
que pretendas que tu hombre vea con tu matiz la vida! No existe tal cosa como que hablemos ellos y nosotras el mismo idioma emocional! Para eso están las chicas, recurre a ellas! Sólo cuida que sean de tu misma especie,
recuerda..."entre lobos, no se muerden!"

LobadeCiudad dijo...

Agradesco enormidades los comentarios gracias por sus palabras , su cariño y empatía . Gracias por esta aquí , cuándo mas siento necesidad, cuando se me cierra mi mundito y me quiero jalar los pelos.
Gracias una y mil veces..
La loba