Este asunto de engancharse con las novelas de amor y por ende salir sublimada al ver alguna película cursi y rosa, creo que nos ocupa a las chicas...Posiblemente, andará por ahí algún romantico caballero, que guste de la poesía y el cortejo, y aún así, no creo que iguale la capacidad que tenemos nosotras de ponernos en los zapatos de la heroína, llorar con sus penas, reir con sus ocurrencias, y hasta podemos llegar a pensar que se inspiraron secretamente en alguna de nuestras historias, para escibir la música del tema.Personalmente, cuento con la particularidad de olvidar tanto unas como otras, al menos, en gran parte de su contenido, y lo considero una ventaja, pues puedo ver ó leer una y otra vez alguna de ellas sin llegar al hastío! Así es como me he dado cuenta que no siempre captamosel mismo mensaje, y lo que un día nos hace suspirar con ternura, al otro nos inunda en llanto! ¿Les ha pasado? Creo que una buena historia, no puede carecer de una de esas frases que nos mueven del asiento ó provocan esa sensación de tener mariposas en el estómago!Tengo mis favoritas! Sé que si memoria no me traicionara, contaría con muchas más en mi repertorio! Pero hay otras que llegan para quedarse! Y captan toda la escencia del relato!¿Quién podría olvidar aquella tan particular?: "You got me at, Hello!" ¿No mueren por decir eso al menos una vez en la relación? Creo que todas las que esperamos una reconciliación en algún momento de nuestras vidas quisieramos oir decir al hombre en cuestión, todas las razones por las que volvió y por las que debemos aceptarlo!¿Qué tal esta otra?: "I choose us!" A mí me hace flotar! Imaginar que pueden darlo todo a cambio de la pareja, es un grado superlativo del amor, ¿no creen?Otra que me encanta y es la simpleza absoluta es sólo esto: "Stay, please, stay!" Inevitablemente, tengo que hacer una pausa aquí para tomar aliento! Pero existe una que de sólo recordarla, me conmueve tanto que puedo derramar alguna lágrima furtiva! Y no es una escena de amor; es lo que llamo, "La oda a la psicoterapia"; pues al estar motivando el terapeuta al joven genio aquel, quien cargaba con un pasado sórdido que le impedía usar su talento a todo su potencial, le repite una y otra vez: "It's not your fault!" Hasta que logra la catársis a base de llanto y se abrazan fraternalmente en uno de los momentos más intensos que he podido observar en una cinta, sin decir ni una sóla palabra más!Cursilerías más, cursilerías menos, no creo que nadie escape a la magia de una de estas frasestan bien logradas por el escritor implicado! Empalagosas, adornadas, ó del más básico y casual lenguaje, pero cumplen con su misión! El efecto producido debería de ser advertido previamente, y así, no preguntaríamos aquello cuya respuesta no queremos oir!Sólo los galanes y héroes de la trama, saben la respuesta acertada! Por eso, caemos rendidas!
Penélope
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